Los Puentes...

Y no los de Madison, lo que éste navegante ha vivido el fin de semana, en Alhama de Granada, pasando por Santafé y sus capitulaciones, en familia muy directa y muy agradablemente incluyendo pacífica perra madrileña. Son enclaves poblacionales muy distintas, quedándome por Alhama donde aún no ha entrado el urbanismo ni la especulación. Ana muy hogareña y casi de estreno. Frío más que en la capital pero sin espasmos. Los tajos preciosos y con iluminacón perfecta asi como el Carmen y la Encarnación. Gastromia muy variada como los establecimientos y los churros a la levantá. Mis niños monísimos y normales, vamos, que puedes llevartelos, y eso que me faltó una. Singular el paraje de los Bermejales, con el pato loco y el ventorrón. Chorizos y cochinos se complementan, y encima dos roscos televisivos se llevaron de Sevilla. Y bueno, cómo estaban las patatas con huevos rotos en montaña, y el rabo de toro y el plato que se comío mi Toni como un hombre, y eso en Santafe.